Como estamos acostumbrados a que la gente opine, juzgue y comente sobre nuestros hijos con TDAH, empezamos una serie de consejos útiles sobre cosas que deberíamos evitar decirles a los padres de niños con TDAH sin habernos puesto antes sus zapatos.
(I) LO SIENTO, NADIE HA PEDIDO TU OPINION SOBRE LA MEDICACION QUE DEBO DARLE A MI HIJO CON TDAH
Cuando los padres que tenemos niños con TDAH decidimos utilizar los fármacos para tratar a nuestros hijos pasamos por un largo proceso, no suele ser una decisión tomada a la ligera, generalmente es una decisión difícil que tomamos asesorados en su caso por psicólogos, neurólogos, docentes, que consultamos con la almohada, con nuestra pareja…y que tomamos pensando SIEMPRE en el bienestar de nuestro hijo, no en nuestra comodidad o beneficio.
Ningún padre desea que su hijo tenga TDAH y a ningún padre le gusta tener que medicar a su hijo por un trastorno neurobiológico.
Debemos respetar la decisión de todos los padres de niños con TDAH, decidan o no optar por la medicación, muchos niños con TDAH no diagnosticados ni medicados han llegado a ser adultos con un brillante futuro profesional, otros no. Lo importante a mi juicio es saber detectarlo a tiempo y actuar en consecuencia, no perder de vista su existencia y valorar cómo puede afectar a tu hijo para que no le repercuta de forma negativa.
En mi caso ya he contado en otro artículo del blog (http://tdahcontigo.com/tdah-medicacion/) que me costó mucho tomar la decisión de optar por la medicación, de hecho cuando me plantearon esa opción estuve un año negándolo y cambié de opinión cuando me di cuenta que mi hijo estaba sufriendo, valorando los beneficios que podía obtener a nivel escolar y social. Aun así, ya decía en ese artículo que “me sigue costando mucho medicarlo, que le doy la mínima dosis y el mínimo de lo prescrito, y que por las tardes cuando sale del colegio si no tiene necesidades escolares específicas no le doy medicación alguna…con medicación es mucho más fácil, sin medicación hay tardes mejores y tardes terribles…Muchas tardes básicamente sobrevivimos en casa con tres niños y un TDAH. No obstante, también sé que la necesidad de medicación por las tardes se acentuará en los siguientes cursos escolares porque los deberes serán diarios”.
Pues sí, efectivamente, las necesidades se multiplican con la edad, y no me arrepiento de haber tomado la decisión de medicar a mi hijo, la experiencia me dice que ha sido la decisión correcta, al menos de momento hemos evitado el fracaso escolar, mejorado su autoestima y conseguido una muy buena integración social con los demás niños.
Pero por desgracia no solo tenemos que tomar la decisión de si queremos o medicar a nuestros hijos, si no que tenemos que estar continuamente justificándonos por ello frente a los demás.
Los padres de niños con TDAH somos como sus asesores de imagen permanentes y tenemos que estar continuamente dando explicaciones por ellos, al menos a mí me pasa: a la profesora para que entienda que a última hora de la tarde el niño no atiende porque esta ya que se sube por las paredes; al entrenador de futbol para que sepa que muchas tardes no se concentra porque ya le ha pasado el efecto de la medicación pero en los partidos sí porque son por la mañana, al vecino porque el niño se sube por las paredes cuando llega a casa después de todo el día….etc.
A todos los que protestan por la actitud de tu hijo pero cuando vas a explicarle que tu hijo es hiperactivo te dicen: “Uy, la medicación del TDAH no se la des nunca que tiene muchos efectos secundarios”.
Resulta chocante que precisamente las personas menos comprensivas y pacientes con tu hijo con TDAH, son las que cuando intentas explicarle lo que sucede te contestan opinando sobre lo que debes hacer o no, ya el colmo cuando te advierten sobre los efectos negativos que puede tener la medicación sobre ellos como si fueran profesionales expertos.
A ti que lo castigas porque molesta en clase cuando lleva dos horas sentado y necesita moverse, a ti que no le convocas a los partidos porque dices que no se concentra en los entrenamientos, a ti que te molesta cuando mi hijo pasa por tu lado, ME ESTAS OBLIGANDO A JUSTIFICARME ANTE TI, PERO ESO NO SIGNIFICA QUE TE HAYA PEDIDO OPINIÓN SOBRE LO QUE DEBO O NO DAR A MI HIJO CON TDAH.
Así que cuando un padre/madre de un niño con TDAH se sincere y te hable sobre ello, piensa que está tratando de explicarte una situación personal, NO te está pidiendo a ti que opines sobre la misma, tenlo en cuenta por favor.